Mini créditos al instante
En caso de que necesitas rápidamente un dinero extra para cubrir una falta de liquidez de momento, puedes encontrar una gran variedad de las ofertas de mini créditos al instante, es decir, créditos por importes pequeños de alrededor de 1 000 € máximo, a devolver en un plazo corto, normalmente hasta 30 días. El servicio de solicitud y aprobación del crédito está disponible 24 horas y actúa completamente en línea, así puedes conceder un crédito online de manera inmediata, en cuestión de minutos. La Tasa Anual Equivalente (T.A.E.) de los mini créditos al instante puede ser demasiado elevada, dependiendo de la compañía particular.
Proceso de solicitud y aprobación
Como hemos mencionado, el proceso de solicitud es 100 % online, rápido y automático. Para solicitar un crédito online, rellenas un formulario con tus datos personales en las páginas web del prestamista y facilitas toda la documentación necesaria vía correo electrónico o verificándote a través de tu banco online. Obtendrás la respuesta inmediata, dentro de unos pocos minutos. En caso positivo, el prestamista transferirá el dinero a tu cuenta bancaria al instante. Sin embargo, si tu banco es distinto del banco con que opera el prestamista, la transferencia puede tardar hasta 48 horas.
Requisitos para solicitar un mini crédito
Para que se acepte tu solicitud de un mini crédito al instante, debes cumplir con unos requisitos generales: ser mayor de 18 años, residente en España con un documento de identidad válido (D.N.I./N.I.E.), disponer de un teléfono móvil y un correo electrónico, y operar con una cuenta bancaria para verificarse e ingresar el dinero. Los prestamistas particulares pueden solicitar además otras condiciones, como demostrar unos ingresos periódicos o no tener deudas con terceros. Al contrario, muchas de las ofertas de los mini créditos al instante están disponibles también para clientes con ASNEF.
Condiciones de devolución y opciones adicionales
Algunas ofertas de mini créditos al instante permiten la devolución anticipada, el aplazamiento de pago, etc., dependiendo del contrato particular y las condiciones actuales de cada prestamista.